lunes, 17 de agosto de 2009

VISITA AL ASILO DE ANCIANOS DE LA CIÉNAGA

QUE LA MEDIOCRIDAD DE MIRADAS NO NOS MATE LOS SUEÑOS




“Para ayudar a los otros, no alcanza con tener plata, es necesario tener sensibilidad”

El Centro de Voluntarios “Mami Adriana”, de San Pedro de Jujuy, el domingo 16 de agosto visitó el Asilo de Ancianos de La Ciénaga, para realizar con los veinticuatro abuelos y el personal que los atiende la celebración de la Pachamama y compartir un sabroso asado preparado por los voluntarios del Centro.

Llegados al Hogar San José, reunimos a todos los abuelos y comenzamos con los preparativos de la celebración, queremos destacar la figura de Antonia Castellón, madrina de la Pachamama que lleva el nombre de “Rosa Lourdes”, por su dedicación, y la curada preparación de todos los pasos del rito realizado. Todos los integrantes del Hogar se sumaron al festejo aportando su presencia activa, sus relatos cargados de sabiduría, de historia, que constantemente nos invitaba a beber del pozo de la sabiduría popular, realmente un instancia de aprendizaje para los niños, los jóvenes, los adultos y adultos mayores del “Mami Adriana”. A lo largo de toda la jornada se respiró un clima de respeto, de valoración de tradiciones ancestrales, y una poderosa conexión con la naturaleza, un gran sentimiento de agradecimiento por todo lo que la tierra generosamente nos ofrece. Reunidos en torno al pozo, los presentes fueron aportando con gestos reverenciales y en profunda conexión con sus ancestros una riqueza inusual que solo es regalada cuando se crean estos espacios de encuentro donde la espiritualidad es un componente esencial. Fue interesante observar en los rostros de los abuelos, rostros que llevan por un lado las marcas del dolor y del sufrimiento, pero también la riqueza de una vida fecunda, de una vida que siempre se ha resistido a perder el verdadero sentido, una profunda alegría, y serenidad. También es importante destacar el sentido de trascendencia vivenciado, como de la celebración de la madre tierra elevaban su espíritu al Señor de la Vida, dador y sostenedor de toda vida. A continuación compartimos un rico asado que fue donado por las carnicerías “El Torito”, “Roque Juancito Hermanos”, “Las Varillas”, “La Feria de la Carne”, a las cuales agradecemos su generosidad y su desinteresada colaboración, animamos que gestos como estos se sigan repitiendo en nuestra comunidad. Cerramos el encuentro con una guitarreada, donde no faltó el baile, los cuentos y los versos inspirados.

Queremos comunicar que por pedido de la Dirección de Adultos Mayores, a partir de la próxima reunión se conformará un nuevo equipo a cargo de la abogada Silvia Roldán, dependiendo de la Secretaría de Asuntos Sociales de la Municipalidad de San Pedro, para dirigir el Centro de Adultos Mayores. Los que nos vamos les deseamos a este nuevo equipo el mejor de los éxitos y que puedan seguir profundizando los procesos de formación, de fortalecimiento de la identidad, de oportunidades para seguir mejorando la calidad de vida, manteniendo siempre en alto el lema que nos acompañó en estos ocho meses de trabajo: “POR MAYOR JUSTICIA Y DIGNIDAD”.

Agradecemos a este grupo de Adultos Mayores la posibilidad de haber compartido este tiempo de vida, con significado, con aprendizaje, con tanta calidad humana. ¡MUCHAS GRACIAS!

lunes, 10 de agosto de 2009

EL VUELO QUE NO SE DETIENE




“Podrán cortar todas las flores,
Pero no podrán detener la primavera”.


El Centro de Voluntarios “Mami Adriana”, de San Pedro de Jujuy, sigue creando espacios de encuentro, de crecimiento, de creatividad y de vivencia de valores. En la última reunión de centro, se trabajó fundamentalmente sobre dos objetivos, la preparación de la visita al Hogar de Ancianos San José de la Ciénaga, el domingo 15 de agosto, para la celebración de la Pachamama, compartir un asado, y un tiempo para los juegos, el canto y el baile.
También se trabajo, a partir de la parábola “El vuelo de los gansos”, sobre las fortalezas y debilidades que se detectan, después de ocho meses de caminada, en el grupo, para seguir proyectando el Centro en los barrios y en la ciudad.
De la tarea realizada en los equipos, se destacaron como luces de la organización, la capacidad de compartida, la participación en las reuniones, el sentido celebrativo, las salidas, la operatividad para compartir los trabajos, el clima de alegría, y la responsabilidad, como sombras que se evidenciaron, la poco comunicación entre todos, la falta de un mayor compromiso, la puntualidad en las reuniones, cuesta delegar, y que algunos integrantes hablan muy poco.
Después de la presentación de cada uno de los grupos, partiendo de la enseñanza de la parábola se realizó un aporte integrador destacando las siguientes ideas fuerzas para seguir reforzando la comunidad, la gente que comparte un mismo objetivo y sentido de comunidad puede llegar donde van de manera más fácil y rápido, ya que al viajar unidos se van apoyando mutuamente, si nosotros asumimos la misma sabiduría del ganso, nos mantendremos en formación con aquellos que van en la misma dirección y estaremos dispuestos a aceptar su ayuda como también a darle la nuestra a los demás, la presencia de los otros encierra para nosotros y para los demás un gran riqueza, es necesario ir alternándose para realizar las labores más desgastadoras y compartir el liderazgo, todos nos tenemos que sentir corresponsables de la tarea a realizar, al igual que los gansos nosotros dependemos unos de los otros, la importancia de cuidar a los compañeros de camino, ver qué les pasa, cómo se sienten, qué necesitan, debemos asegurarnos que nuestros “graznidos” sean para alentar y no para desalentar, siempre podemos ir por más justicia y por más dignidad, por más respeto, y por más sueños, si tenemos tanto sentido como los gansos nos ayudaremos mutuamente en los tiempos difíciles y en aquellos de fortaleza, y esto es así porque desde el inicio fuimos capaces de poner en el centro de nuestros intereses al otro, al hermano, la hermana, porque luchamos por una sociedad más justa, en la cual todos y todas tengan su espacio de crecimiento, de realización, y de felicidad.

domingo, 2 de agosto de 2009

DÍA DE LOS ABUELOS


LA SABIDURÍA DE UNA ETAPA DE LA VIDA PUESTA AL SERVICIO DE LOS DEMÁS...

“La vida es vida cuando todo se hace sentir: todo, absolutamente todo: las lluvias, el frío, el sol, el polvo, la escasez y la abundancia, la ausencia y la presencia…todo”.


El Centro de Adultos Mayores “Mami Adriana”, de San Pedro de Jujuy, se reunió para celebrar el día de la abuela y del abuelo, a medida que va pasando el tiempo todas y todos vamos tomando cada vez más conciencia de la importancia de la celebración, celebrar la vida, los acontecimientos, el encuentro, los logros y los fracasos. El celebrar nos nutre, nos potencia, alimenta los sueños y sigue fortaleciendo nuestro caminar.

Comenzamos el encuentro recorriendo nuestro cancionero folclórico, haciendo presente la poesía, la vida, los valores, la cultura y el mensaje esperanzador de tantos poetas que han sabido ponerle música a su inspiración. Seguidamente en grupos, se trabajó sobre las experiencias más ricas de ser abuelos y/o de haber compartido momentos con nuestros abuelos. De la reflexión, por ejemplo Elva señaló que cuando se convirtió en abuela fue muy feliz, y se sintió más responsable de brindar su servicio y ayuda con todo su amor. Felipa, nos dijo que es feliz de ser abuela por tener una experiencia en la que puede dar cariño a sus nietos. Justina expresa su felicidad porque pudo compartir con sus abuelos cariño, comprensión y escucha. Natalia también señaló que aprendió de sus abuelos a ser responsable, a respetar, a ser solidaria, a tener metas, a tener sueños. Los otros participantes en forma conjunta enfatizaron que como abuelos y en relación con su propios abuelos aprendieron a valorar la cultura, el deporte, a valorar la niñez, a tomar conciencia de la importancia de cuidar la vida y de poner en el centro de nuestras decisiones, acciones a las otras personas.

Después de este rico espacio de intercambio continuamos con el almuerzo, algunos nietos prepararon un rico asado que fue compartido con alegría, reconocimiento, y hasta con lágrimas de emoción. Finalizando el encuentro no faltó el baile, el canto, la poesía, los cuentos, y los sorteos. Nos retiramos con la clara conciencia de haber fortalecido nuestra identidad, nuestra autoestima, nuestra conciencia de lo que somos y valemos como personas. Sabemos que en cada encuentro que tenemos seguimos creciendo como personas, como adultos mayores, adultos, jóvenes y niños que integramos este grupo. Damos gracias por el don de la vida y por todas las oportunidades que se nos brindan.